DESARROLLO FISICO Y MENTAL DEL NIÑO

 

La actividad física es un factor totalmente esencial en el desarrollo de un persona y más aun cuando se trata de un niño. El Karate y las artes marciales en general, cubren en 100% estas necesidades, proporcionando un desarrollo equilibrado y harmónico a todos sus adeptos.

El Karate, a diferencia de otros deportes, no se limita al desarrollo puramente físico, no menos importante es el desarrollo psicológico y mental de sus alumnos. Las normas de todos los que practican artes marciales están definidas en “Dojo Kun”, que es un compendio de los valores que debería reunir cada alumno de karate.

Éstas metas son posibles de alcanzar a través de un entrenamiento físico y mental basado en arte, cuyas raíces tienen más de mil años de antigüedad. El fin definitivo es encontrar un perfecto equilibrio entre la mente y el cuerpo, entre “sacro” y “profano”, el “Yin” y el “Yang”…

Si todo esto suena demasiado abstracto, también se puede describir los beneficios de estudiar artes marciales diciendo que fortalecen el cuerpo y la mente, mejoran la velocidad, coordinación, fuerza, proporcionan seguridad y confianza de sí mismo.

Karate enseña y educa y como todo tiene que tener su principio, estudio de artes marciales empieza por las formas físicas para poder llegar con el paso del tiempo a descubrir su verdadero significado que cambiará nuestras vidas para siempre en casi todos los aspectos, ya que entonces simplemente seremos mejores personas.

El gran maestro de karate Gichin Funakoshi decía: “Karate ni sente nashi” “karate nunca ataca primero”. Esta famosa frase define la esencia de artes marciales que son un arte de autodefensa y no de agresión, por tanto nunca atacan primero, solamente permiten defenderse con éxito. El “Dojo” (gimnasio de artes marciales) es un entorno en donde los alumnos pueden aprender a través de los instructores y compañeros, los elementales valores como: disciplina, trabajo en equipo, sacrificio.

Hablando de adultos, en el “Dojo” se reúne gente de diversas edades, profesiones y grupos sociales lo que favorece y forja la capacidad de cooperación frente a las mismas metas y objetivos. En pocas palabras: el karate enseña a ser competitivo y a la vez formar parte de un grupo de amigos.

A pesar de que se trata de una disciplina individual, los jóvenes alumnos paradójicamente aprenden a rivalizar y cooperar en el mismo grupo, lo que luego se traduce a que muchos de ellos triunfan en la vida adulta dentro de una empresa donde es esencial poder reunir estos dos valores de manera equilibrada, sin mencionar la seguridad en si mismo que da impulso a todos nuestros proyectos. La mística de artes marciales hace que las personas que practican este deporte se sienten únicas ya que por lo menos una parte de sus vidas también es única proporcionándoles “catarsis” que purifica sus mentes de problemas y preocupaciones diarias, dándoles impulso necesario para afrontar los días siguientes.

El entrenamiento de kárate se basa en la disciplina, perseverancia, concentración a la vez enseñando ser responsable, lo que se traduce directamente a la significativa mejora de los resultados que los niños y adolescentes obtienen en el proceso educativo escolar. Kárate enseña controlar la respiración, corrige la postura y proporciona equilibro al cuerpo.

Todo esto se refleja en los cinturones de diferentes colores de los cuales cada uno tiene su significado indicando el punto del “camino” en que se encuentra su dueño.

El karate se puede practicar desde los 5 años de edad hasta lo infinito, es un camino que nos puede acompañar durante resto de nuestra vida, llenándola de emociones y fuerza tanto física como mental. No todo el mundo sabe que el karate es una de las ramas de yoga dinámica.

Dentro del Mundo de artes marciales, karate Kyokushin ocupa un lugar privilegiado siendo el arte marcial mas grande y fuerte del Mundo, con casi 20 millones de seguidores! Sin embargo también es el más exigente y por este motivo solamente unos pocos llegan a ser profesores y maestros, lo que se traduce a una gran demanda entre las personas interesadas y relativamente pocos centros que ofrecen esta actividad.